miércoles, 22 de julio de 2009

Del cuerpo borrado

Encontré este documento navegando, acerca de la captación del instante borrascoso donde el cuerpo choca con la imagen, y viceversa.. de la captación de ese momento en la retina, del "amar es ver" que identificamos como causa de nuestra fascinación por el cine. Del descubrimiento de nuestra impostura en la desnudez de la pantalla, del pensamiento... en la mordaza que nos pone la cámara cuando nos enfoca, y aprisiona nuestro deseo, y nos desplaza... del cese de nuestro sueño, raído y real, corrompido por la represión... del goce del cuerpo y su extensión fantasma, que deambula por todos los recuerdos... del cuerpo borrado durasiano, que vuelve en cada flash de la película, sustraído.

Noche decrépita

"Yo también necesito amar", decías...
rebelándote a las vísceras de lo real
Intersectando con la vida

El despoblarte de sueños, un día,
tan aciago (una mujer persevera en mi memoria,
que fue madre y dejó en silencio su ronca respuesta.)

¿Adónde ha ido aquel puñado de recuerdos?
como canicas relucientes en tus manos,
se escaparon...

Adónde vas,
testigo de la soledad que barrí un día,
a los jardines del desencuentro,
de la ausencia- donde un sol pálido hace de luna,
y unos ojos tristes de estrellas, hundidas y boquiabiertas.-

Tan consumida está la noche,
que no emite oscuridad,
sólo una paz ambigua y siniestra,
fugándose en la brisa que pasa por el rostro.

Tan ajada está la noche,
que arruga su cuerpo en prematura claridad,
y llueve un polvo seco despavorido del cielo

Esa urdible levedad
que traza la aurora cuando adviene
nos dibuja el gesto extraño.
Esa insólita premura
que atenúa el cáncer de lo cotidiano,
la muerte de la poesía

.Esa urgencia de amar,
y esa indolente criatura llamada Olvido,
aún más urgente,
tan falsa como la suerte de estar vivos.